Decidimos asumir el uso del espacio como posición política. La “okupación” legitimada frente al abandono y el olvido, denunciando el derroche que supone disponer de lugares públicos que pueden suplir necesidades reales.
Practicamos el apoyo mutuo y la solidaridad con colectivos e iniciativas afines, estando comprometidas en luchas sociales, tanto locales como las que trascienden las fronteras.
Aspiramos a generar un espacio intercultural, social y político libre de censuras y alternativo a las imposiciones capitalistas. Un lugar abierto tanto a gentes como a ideas, libre, seguro y sin prejuicios, movido por valores libertarios, antifascistas y feministas.
En líneas generales, estamos comprometidas con la lucha medioambiental, la lucha de clases, la justicia social, los derechos humanos, la defensa de los territorios, el antimilitarismo y el rechazo al fanatismo.